aburrida de esta vida que solo sabe oprimir, que me ahoga y deja en la cuneta lo que un dia proyectaban los espejos en sesión continua. cansada de mendigar afectos que nacen en invernaderos, se conservan en cámaras frigoríficas y mueren al primer contacto humano. aburrida de aburrirme, cansada de cansarme, de respuestas que se pierden sin preguntas que las miren a los ojos, incomprensible me parece esa manía de querer hacer arena de reloj lo que es infinito, abstracto, atemporal y en peligro de extinción. dime tú en que día comenzó el mundo pero seguro que no fue un lunes.
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