viernes, 3 de junio de 2016

keep calm & drink champagne

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usar antes de agitar. leer de fin a principio y quedarse en entrelíneas de la página setenta y tres. esto es una historia para niños mimados, mejor dicho, esta es la historia de un libro mimado y de un carroñero. creía haber encontrado el antídoto a la alquimia del amor y me fui por el sendero del humor. ahora me doy cuenta que llevo mucho tiempo sin usar reloj pero que, aún así, lo seguía usando y en el sentido en que lo cohetes vuelven de la luna. las cuentas atrás te llevan al final antes de haber salido de la línea de fuego. esto no es un "solo" sino un "aún" pero no me creerás hasta que no lo sientas caer sobre ti.
no es una recomendación, ni una sugerencia ni tan siquiera un consejo...no soy tan cru
el para recomendar(te) algo que yo, digo, no usar. aún estoy patidifusa. pero me ha servido para recobrar algo de marejadilla en mitad de tanta turbulencia. no se que esperaba de ti frederic pero te aseguro que no era una puesta de sol en formentera. a nuestros treinta y muchos nos aferramos a un tablero hirviendo en alta mar. volvemos a escribir cartas, nos da por hacer deporte y ponernos contorno de ojos como si fuera la goma de borrar de nuestros temores. porque esto que nos ocurre no es amor. es Miedo. con esa mayúscula que yo nunca uso para que no sobresalga de mis fronteras . deberiamos haber sido economistas. esos no tienen sentimientos. ahora somos chupasangres venidos a menos un uno de junio, y cambiamos la midnight en paris por un puesto estable de crítico literario. y nos sentamos a esperar. aunque yo aguanto poco. ahora entiendo porque siempre me pierdo en el camino de vuelta y no en el de ida. como decia julieta, y permíteme frederic esta intrusión bárbara, "extraño nacimiento del amor que me hace amar a mi enemigo peor". tú aún te ves con marc marronier?
 
permanecer es un verbo difícil de conjugar. a pesar de estar programados para ello. unplagged. 


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